«¡Seguimos en las calles!»

Cada vez que veo una persona sin tapaboca o con uno deteriorado mi corazón se entristece.

El uso del tapabocas es el único escudo que tenemos para protegernos. Utilizarlo previene que nos contagiemos y que contagiemos a los demás.

Por eso, todos los días de mi vida recorro un punto de Miranda distinto para entregarle un tapaboca a todo aquel que lo necesite.

En esta ocasión, estuvimos en Petare debajo del elevado que conduce hacia Palo Verde.

Mañana volveremos a otro punto de Petare para seguir ayudando y sirviendo a la comunidad.

David Uzcátegui.

-> Ir a página principal <–