¿Cómo esta gente rompe un país?
“Éramos felices y no lo sabíamos”
Estas dos interrogantes surgieron de Omaira y Noria en el recorrido que hicimos en Las Minas el jueves pasado, donde aprovechamos para conversar un poco sobre esta situación que nos ha tocado vivir.
Nada es más sabio que la voz del pueblo. Poner el oído en sus angustias, sus incertidumbres y sus esperanzas es lo que puede darle sentido al trabajo político y social en este momento. Ellas, como tantos miles de venezolanos son quienes nos podrán llevar de la mano a solucionar la difícil situación que vive nuestro país.
Al preguntarles si creían que podríamos salir de este momento tan injusto que vivimos, me respondió:
“Yo no pierdo las esperanzas, porque es el bravo pueblo de Bolívar”
Estas palabras las llevo como un amuleto colgadas de mi corazón, serán la guía y luz que tanto necesitamos todos para construir una Venezuela de la que todos estemos orgullosos.
David Uzcátegui.